Un gobierno que hizo de la "mugre" su condición se pone en evidencia cuando sale a pedir a otros que no ensucien. El Secretario de gobierno Luciano Anza o vive en un frasco o no ha salido nunca a caminar la ciudad. La ciudad está sucia por falta absoluta de mantenimiento, el abandono es de no creer. Parece que Meiners y sus amigos están esperando el invierno para que el frío frene el avance de los yuyos. Y no solo en los arrabales como dice el tango, también en el centro y para ser más precisos en plena plaza San Martín ha avanzado la falta de higiene. Es imposible sentarse en los bancos, no solo por cagados (se corre el riesgo de quedarse pegados) sino por rotos y -repetimos- por sucios. 

Que el Secretario de Gobierno le pida a los partidos políticos (que han sido siempre cuidadosos) por la limpieza de la ciudad cuando se le está cayendo el monumento mayor de la plaza principal suena como una tomada de pelo.