"Los sectores de la producción local dicen: “este es un país sin rumbo y no se sabe con qué te vas a encontrar mañana”.
Un representante de importante metalúrgica que opera en el comercio internacional, acotó sobre las dificultades para obtener resultados concretos por parte de funcionarios nacionales, luego de ser atendidos en audiencias: “como empresarios estamos comprometidos con el país pero ellos no nos escuchan, se mantienen ausentes”.
Otra importante reflexión fue que “el país requiere funcionarios competentes e idóneos en los cargos de gestión, empezando por dejar de lado el partidismo y los intereses personales, como también la mentira”. Observaron la falta de diálogo y acuerdos entre los gobiernos y los organismos estatales, lo que entorpece y desalienta aún más la actividad empresaria.

Muchos de estos empresarios deben incluirse dentro de las generales de la ley. Algunos porque votaron a Meiners y por añadidura a Cristina Fernandez. Otros porque se favorecieron con el gobierno que hoy critican. Los más porque presenciaron sin abrir la boca el errático comportamiento de la Intendenta y su gabinete, tal vez para no quedar mal. Los despilfarros de la señora, las obras mal hechas, los edificios en ruinas, el macaneo continuo, también se corresponden con la debacle actual. El grito actual ante una situación vieja como la Patria misma es hoy inoportuno y tardío. Recuerda los llantos desesperados de los ocupantes del Titanic.