Tal vez me equivoque, pero parecería que la ciudad se encuentra ante una oportunidad única y, tales convicciones crecen en virtud de la llegada de dirigentes que,con responsabilidades diversas,  han coincidido (para bien) en este lugar y en estos  tiempos. Da la impresión que en contadas circunstancias, tanto los grupos como los individuos encuentran condiciones favorables de desarrollo dentro de la comunidad, aunque las tareas de conducción no necesariamente coincidan con los intereses particulares. Quién sepa leer entre líneas lo que  el Presidente del CICAE, Víctor Sarmiento dijo, en oportunidad de cumplir la institución 75 años de vida,  estará sospechando con razón que una nueva etapa parece iniciarse en el poderoso y emblemático grupo empresarial. Todos sabemos que nunca el  interés particular privará sobre el interés del grupo colectivo y así es porque cualquier elemento sustitutivo del cuerpo social actúa como parásito y conspira contra el éxito de la tarea comunitaria, los jefes que usan al conjunto para beneficiarse actúan paralizan la marcha y reciben su castigo a la corta o a la larga.  Son los que dicen que la suma de los intereses particulare coincide con el interés general, esa ficción matemática es utilizada por los individualistas más aberrantes de hoy y de siempre para beneficiarse con la tarea comuninataria. La suma de los intereses particulares es un cangrejal con la anarquía como resultante.

Ya nadie discute que la vida en sociedad supone una constante victoria de la solidaridad sobre el egoísmo social. Pero dicha solidaridad se impone merced a la organización comunitaria y (por supuesto) por acción del Estado. No es espontánea en cada grupo ni en cada individuo en cada instante de la vida social, sobre todo no es voluntaria, por eso es necesario que algunos hombres honestos, en un momento de la historia, se compromentan con el interés general, con sacrificio, con algo de clarividencia y más que nada con pasión  para abrir camino dando ejemplo ( de una vez por todas) de subordinación al Todo social.

En esta ciudad hubo de todo. Intendentes buenos y malos, funcionarios de la peor calaña, actores sociales que dieron la vida por sus ideas y otros que se aprovecharon miserablemente, empresarios parásitos que estafaron al pueblo donde nacieron y otos casi heróicos que se jugaron generosamente por sus vecinos. En la noche del 75 aniversario del CICAE, soincidieron dirigentes de todas las épocas, desde los poderosos históricos del 40 hasta los nuevos apellidos del siglo XXI. Nos sorprendió y reconfortó gratamente el discurso que incluye el Interés General como superación de los intereses particulares, nos gratificó la idea de la acción empresaria es como un proceso dialéctico que incluye una jerarquía de valores, donde hasta el viejo axioma que dice que el ¨Todo es superior a las partes¨ puede exigir un sacrificio de sus conductores.

Los candidatos a conducir la provincia estuvieron presentes y con su presencia reconocieron implícitamente el importante poder de convocatoria del CICAE. Y por si esto fuera poco ahora el predio donde se realiza la Feria de Las Colonias pasó a propiedad de la organización empresaria, gracias a los oficios de un político ciudadano remando junto con los industriales y comerciantes.  Tareas de conjunto que le dicen.

¿Será que todo se endereza para bien? Hombres nuevos, más generosos, que juegan de compañeros cuando de la ciudad se trata. La ciudad ...  La ciudad, mientras tanto, observa los movimientos de sus dirigentes y se reconforta cuando todo parece dirigirse hacia la reconstrucción de la buena fe generalizada.  Ojalá  no se corte.