Muchas veces la envidia nos hace desechar las realizaciones ajenas y, simplemente, “porque lo hizo otro” se abandona todo lo bueno y se parte de cero. Eso se vio hasta ahora en la gestión de la señora Meiners, lo malo es que se reitera en ese vicio.  La envidia es un mal que conspira contra el progreso de la ciudad.  Las cosas por hacer siguen por hacer luego de más de cinco años de calentar los sillones.  Meiners se repite en sus errores y obtiene como resultado la nada. ¿Qué debería hacer la señora? Bueno, hoy se presentan dos desafíos importantes frente a las narices de la Intendenta: Plan de Pavimento y Viviendas.  En realidad, se cuentan con la mano los que piensan que este “equipo” de funcionarios con la alcaldesa en la jefatura llegue a concretar algo, pero igual, tal vez, si la dama fuese capaz de sofrenar la “envidia” otro gallo cantaría.  ¿Por qué no se pregunta quienes son los que saben de viviendas por la sencilla razón de que han hecho viviendas en nuestra ciudad? Respuesta: los radicales (tráguese la envidia aunque le palpite peligrosamente la yugular). Segunda Pregunta: ¿Quienes son los que saben de pavimento porque son los únicos que han hecho pavimento en la ciudad? : los radicales.  ¡Entonces vaya y pregúntele a los radicales! ¿Qué está esperando? .

¿Qué está esperando?: Muy sencillo, está esperando que le afloje la envidia.  No puede darle crédito a la contra. Meiners tiene el estómago sensible y preparado solo para combatir a sus oponentes, en todo caso para darle la culpa de lo que ella no puede hacer, pero, pedir consejo, ayuda, no puede, está discapacitada para pedir ayuda a los radicales.  ¿Entonces? Entonces no va a hacer absolutamente nada. Y lo poco que va a hacer (si lo hace) lo hará mal, cometiendo los mismos errores que cometieron (y superaron) sus adversarios en el inicio. Lo trágico es que le hará perder tiempo a la gente que vive en esta ciudad. ¿Cuántos años perderemos por ser envidiosos? ¿Diez, quince...? 

Las obras que incluyen pavimento y viviendas, más todo lo que viene acompañando como cloacas, gas, agua corriente, redes de energía eléctrica, alumbrado público, estabilizado, afirmado,  arbolado, espacios verdes, esparcimiento, no son cosa fácil, tampoco de un solo gobierno, en estos temas hay que saber pasar la sortija, trasladar la experiencia, colaborar con los que llegan, para no perder tiempo, para no hacerle perder años preciosos a la gente.  Claro que, para eso, hay que dejar la envidia en el ropero.