Miedo, temor de no regresar a casa, incertidumbre y desconfianza fueron algunas de las palabras que repitieron los comerciantes de distintas zonas de la ciudad al ser consultados por El Litoral sobre qué sienten a la hora de abrir sus negocios y comenzar la jornada. Es que la muerte de Alfredo Segado, el comerciante de avenida General Paz que fue baleado el 30 de septiembre, generó conmoción en la ciudadanía pero sobre todo en quienes se dedican a la actividad comercial.

En la ciudad no fue la primera vez que en una circunstancia de asalto falleció una persona inocente, que durante décadas se dedicó a la venta para poder sostener una familia. La lista de nombres y apellidos de trabajadores que murieron en un hecho de inseguridad es larga y preocupa a quienes todos los días se levantan y abren las persianas de un local.

A principio de mes, el Centro Comercial difundió el resultado de una encuesta que fue realizada anteriormente al fallecimiento de Segado sobre cuáles son las principales preocupaciones del sector. En ella, la falta de seguridad fue lo más señalado; incluso más que la inflación.

“Este negocio lo abrió mi abuelo. Varias generaciones vamos pasando por acá, pero realmente yo no quiero seguir más. Todos los días te enterás por la televisión que hubo un robo o un asalto a un comercio, o hasta una muerte. Trabajar así no es saludable”, manifestó la dueña de una importante mueblería ubicada sobre Aristóbulo del Valle.

Los comerciantes coinciden en que los delincuentes están a la orden del día y que ya no les importa arrebatarle la vida a alguien aunque sea para robarle 100 pesos.

más tecnología para disuadir

En Santa Fe, las cámaras de seguridad que vigilan la peatonal San Martín y sus alrededores lograron reducir el delito en esa zona. Pero no en el resto de la ciudad.

El gobierno provincial comunicó la intención de colocar un sistema de videovigilancia en Santa Fe y Rosario y adelantó que llamará a licitación para instalar unas 600 cámaras de seguridad entre las dos ciudades que funcionarán en forma coordinada con el 911 y serán monitoreadas por los municipios. Los aparatos se ubicarán en los accesos, en las principales avenidas y en edificios públicos.

Consultados al respecto, los referentes de las principales avenidas de la ciudad dijeron estar de acuerdo con la instalación de estos dispositivos, en especial por los buenos resultados que lograron en la peatonal San Martín, aunque aseguran que esa no es la solución de fondo para combatir el delito.