La soledad de Hugo Moyano en el movimiento sindical ayer se agigantó. Importantes dirigentes que hasta ahora venían alineados con el camionero, como el taxista Omar Viviani y el maquinista Omar Maturano, se alejaron ayer de manera formal del moyanismo y se sumaron al sector sindical que impulsa la candidatura del metalúrgico Antonio Caló como próximo jefe de la CGT. Enterado de que esos dirigentes se alejarían de su espacio, Moyano redobló la apuesta: acusó ayer al Gobierno de aplicar “las políticas” de la diputada opositora “Patricia Bullrich”.

Los dirigentes de la disidencia moyanista participaron ayer a la tarde de una cumbre en la UOM con dirigentes de gremios del sector de los “Independientes”. El apoyo a la candidatura de Caló fue por dos vías. Una implícita: la reunión fue en las oficinas del secretariado nacional del gremio metalúrgico y con la presencia del propio Caló. Otra explícita: Gerardo Martínez, titular de la UOCRA, reconoció abiertamente que el encuentro podía interpretarse como un respaldo a Caló.

Por los “independientes” participaron de la reunión Martínez, Andrés Rodríguez (UPCN) y José Luís Lingeri (Obras Sanitarias), tres sindicalistas que hace rato se alejaron del camionero en la CGT. La novedad de ayer, anticipada por Clarín , fue que al grupo se acoplaron dirigentes que históricamente estuvieron alineados con Moyano, como Viviani, Maturano, Omar Suárez (Portuarios), Horacio Ghilini (Docentes Privados), Noé Ruíz (modelos), Ricardo Frecia (aeronavegantes) y Norberto Di Prospero (personal legislativo).

También estuvieron los municipales Amadeo Genta y Alejandro Amor. Los municipales eran hasta ahora el gremio más importante, por la cantidad de delegados que envía al congreso que elegirá a las nuevas autoridades cegetistas, que seguía al lado de Moyano.

Casi como una declaración de principios, en la reunión de ayer se definió que “la CGT debe seguir acompañando al Gobierno” . Esta es la línea divisoria que probablemente haga imposible un acuerdo con el camionero.

Igual, ayer se resolvió invitarlo a la reunión que todos los sectores sindicales, menos hasta ahora el moyanismo, tendrán el próximo martes en la UOCRA. En estos días, además, una delegación formada por Caló, Martínez y Genta intentará convencer a Moyano de que baje su candidatura.

Ayer se habló sobre la próxima reunión en la UOCRA. Algunos dirigentes pusieron reparos a reunirse con dirigentes del grupo de “Los Gordos” y el gastronómico Luis Barrionuevo. Al final, todos los que estuvieron ayer se comprometieron a ir el martes: “Primó el criterio de que si queremos la unidad tenemos que estar todos ”, confió a la salida un dirigente.

Un puñado de horas antes de la cumbre antimoyanista, el camionero encabezó un acto en la CGT de mujeres sindicalistas. Allí, el jefe cegetista volvió a insistir con que prefiere perder la elección en la CGT con “dignidad” antes que ganar “con vergüenza”, en referencia a que no piensa buscar una alianza con sus rivales sindicales.

En una crítica directa a las cumbres sindicales como la de ayer, Moyano sostuvo: “Ya no son más los dirigentes los que deciden quien conduce a la CGT. Creo que es la primera vez en la historia que se va a disputar una conducción de la CGT con el voto secreto y directo de los delegados de cada organización. Es una muestra cabal de que sí queremos practicar la democracia en nuestra organización gremial”.

También acusó al Gobierno de estar quitándoles más a los trabajadores con el impuesto a las Ganancias “que Patricia Bullrich” cuando era ministra de Trabajo de la administración de Fernando de la Rúa. “Este Gobierno critica a Patricia Bullrich porque le sacó el 13 por ciento a los trabajadores estatales, y este Gobierno nos saca más ”, disparó. Se volvió a quejar, además, de que la Casa Rosada le “niega el diálogo”.