Los santafesinos volverán al cuarto oscuro y se encontrarán con 21 boletas diferentes que tendrán un número variable de cuerpos porque no todas incluyen todas las categorías, con un máximo de cinco: Presidente y vice, legisladores al Parlasur, diez diputados nacionales por Santa Fe, tres senadores nacionales por Santa Fe y un representante al Parlasur.

En los casos de los partidos que tienen internas a nivel nacional, el votante santafesino deberá fijarse muy bien a qué candidato a presidente están adheridos los legisladores que escoja. Por ejemplo Reutemann estará tanto con Macri como con Elisa Carrió, además del radical Sanz. Ojo los radicales locales no vaya a ser que por votar a Sanz voten de rebote a Reutemann. 

Binner en cambio no estará con Stolbizer porque comparte lista con radicales y demás partidos del Frente Progresista, algunos de cuyos miembros apoyan a otros candidatos presidenciales. En cuanto a Perotti y Scioli, no hay confusión posible, van en la única nómina admitida por el kirchnerismo. 

No es sencillo, aquél que quiera desocuparse rápido, tiene todos los número para votar cualquier cosa. Tal vez esa carambola favorezca a quienes no se quiera favorecer. Hay que reconocer que el lío impresionante que armó la oposición con las alianzas y matices termina por perjudicar a sus propios candidatos. 

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