Una multitud de 20 mil personas recibió al plantel del seleccionado argentino de fútbol en el estadio Centenario del club Sarmiento, de Resistencia, donde hoy a las 16 jugará un amistoso ante Paraguay como preparación para la Copa América que se hará en el país.

Resistencia vivió una verdadera revolución con la llegada del plantel de Sergio Batista, y puntualmente en el estadio se hizo una fiesta enorme para recibir a los jugadores con la presencia del gobernador chaqueño, Jorge Capitanich.

Fuegos de artificio y música acompañaron una especie de "vuelta olímpica" que hicieron los jugadores argentinos, y la mayor ovación se la llevó el arquero Juan Pablo Carrizo, envuelto en una polémica por sus cuestionadas actuaciones en River Plate.

"Para nosotros no importa que sea una selección local. Es la Selección y podemos ver de cerca a jugadores que apenas vemos por la televisión", dijo Juan Carlos, uno de los miles de hinchas que se dieron cita en el flamante estadio Centenario.

El plantel, acompañado por Carlos Salvador Bilardo (director general de Selecciones) y el presidente de Argentinos Juniors, Luis Segura, (a la cabeza de la delegación), apenas hizo el reconocimiento del campo, pero eligió entrenarse en la cancha de básquet: hubo algunos movimientos leves de regeneración y trabajos con pelota.

Entre los jugadores se mezcló también el secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), Sergio Marchi, invitado especialmente para la ocasión.

En las afueras del hotel Amerian se vivió una situación similar, y solamente el fuerte vallado (extendido a lo largo de toda la ciudad) impidió que los hinchas desbordaran el hall central.

Esa distancia, sin embargo, no impidió que la gente expresara su felicidad por la presencia del seleccionado y, al ingreso de Batista, reclamó con cantos la incorporación del jugador del pueblo: Carlos Tevez.

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