El municipio ha quedado al mando de un sustituto. Ni siquiera se digna el susodicho en ocupar un cargo, solo se maneja en las sombras con la ventaja de ser el motivo de las causas y nunca de las consecuencias. El asesor legal del municipio tiene intenciones de copamiento, ha colocado a toda su prole en cargos municipales sin exigencia de pericia ni técnica ninguna. El único requisito es que obedezcan sus instrucciones.

No satisfecho con su avance por las oficinas que manejan presupuestos, últimamente ha intentado copar el partido justicialista con la complicidad de su mano derecha el leguleyo Bergayo que pudo conseguir unos doscientos votos que no le alcanzaron para irrumpir en el sillón de la básica. Mientras tanto la oposición radical mira impávida como el lobo acecha a la abuelita y si bien no tiene intenciones de comérsela (no le conviene y la reserva para echarle la culpa de todo), con la ayuda de la pobre inocente el asesor avanza por los pasillos armando su telaraña. Ahora ha convencido a Mamá Juniors de que la Municipalidad debe "ajustarse a derecho" o sea que debe "arreglar" todos los juicios que tiene sin apelar, ni continuar insistiendo en ganarlos. Por supuesto que los arreglos los hará el asesor y serán malos arreglos para el municipio y muy buenos para él. Si seguimos así nos estrellamos.